DIA INTERNACIONAL DE LA CERO DISCRIMINACION

Discriminación; una palabra que nos lleva a pensar inmediatamente en un trato diferenciado, pero en forma perjudicial en contra de una persona o de un grupo de ellas. Por lo general, cuando se habla o menciona la palabra discriminación nos evoca al ámbito racial, sin embargo, hay diversas y múltiples formas de discriminación; por sexo, condición económica, enfermedades, discriminación laboral, por género, edad, etcétera.

A lo largo del tiempo, distintos organismos internacionales e internos de cada país se ocupan de erradicar la discriminación mediante distintos instrumentos. Es por este motivo que, el 1 de diciembre del 2013, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó como el Día Internacional de la Cero Discriminación y, no solo se enfoca en concientizar y trabajar para eliminar la discriminación en contra de personas seropositivas sino que, este año, el tema a tratar específicamente es la “cero discriminación contra mujeres y niñas”.

Actualmente, vivimos una realidad lamentable en cuanto a la situación asimétrica que tienen millones de mujeres y niñas frente a la población masculina. En todas partes del mundo, aun se promulgan leyes discriminatorias para la población femenina, impidiéndoles acceder a una educación igualitaria, a un sistema de salud adecuado, a un trabajo digno y bien remunerado entre otros servicios sociales que son primordiales para el buen desarrollo, integral e inclusivo que todo ser humano, sin distinción debe de tener. Según el Banco Mundial, las mujeres constituyen la población más pobre del mundo, y el número de mujeres que viven en condiciones de pobreza rural ha aumentado el cincuenta (50) por ciento desde 1975. Las mujeres realizan los dos tercios de las horas laborales en todo el mundo y producen la mitad de los alimentos mundiales; sin embargo, estas perciben únicamente el diez (10) por ciento de los ingresos mundiales y poseen menos del uno (1) por ciento de la propiedad mundial. [1]

Una situación similar viven las personas que padecen y son portadoras del VIH/SIDA. De acuerdo con el Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONU SIDA) existen al menos 20 países, territorios y áreas donde se imponen algún tipo de restricción a la entrada, estancia y residencia de personas con VIH. Al menos 35 millones de personas han muerto a causa de esta enfermedad desde que se diagnosticaron los primeros casos. En el 2017 más de 36 millones de personas vivían con el virus. Más de 1.8 millones de personas se infectaron ese mismo año, mientras que alrededor de 940,000 mil personas perdieron la vida con enfermedades relacionadas al virus VIH. [2]

En el Perú, la discriminación es pan de todos los días, nuestra patria es un país multicultural, con diversas etnias y grupos humanos que cuentan con costumbres y visiones del mundo diferentes. Estas características juegan un papel importante en nuestro comportamiento social cotidiano. Comencemos por decir que la discriminación es una expresión de violencia estructural de las sociedades. La “Encuesta sobe Percepciones y Actitudes sobre la Diversidad Cultural y Discriminación Étnico Racial” arroja que el treinta y uno (31) por ciento de peruanos han experimentado algún tipo de discriminación tanto en espacios públicos como privados. Asimismo, estos actos han acontecido en instituciones públicas como hospitales, comisarías y municipios. En conclusión, los encuestados manifiestan haber sido discriminados por su nivel de ingresos, vestimenta, forma de hablar, físico, etc. En total, encontramos que el mayor motivo de discriminación es por racismo. [3]

Habiendo detallado y expuesto algunas cifras a nivel mundial y a nivel nacional, podemos aterrizar algunas ideas y opiniones acerca de este ampuloso tema. Si bien esto es una lucha constante, en la cual, nuestro objetivo es erradicar por completo cualquier diferenciación que dañe a otro ser humano, tenemos que tratar este tema de forma integral, teniendo en cuenta que en realidad no todos los grupos humanos son iguales, tienen distintas formas de actuar de acuerdo a sus costumbres y vivencias. Por lo tanto, lo que se debe trabajar es la tolerancia, entendimiento y respeto ante las diferencias, opiniones y maneras de ver el mundo de los diversos grupos humanos.

En términos generales, la discriminación no permite el avance de los seres humanos, impone barreras absurdas y atenta contra los derechos humanos y fundamentales con los que todos contamos como respaldo a alguna violación de ellos; la discriminación no nos permite ver más allá de nuestras fronteras, no nos permite aprender de nuestros congéneres, y nos limita de muchas maneras. Este 1 de marzoujb, veámoslo como una oportunidad de interrelacionarnos como sociedad y ser más empáticos entre nosotros teniendo un panorama positivo de la realidad.

Bibliografía

[1] https://www.ohchr.org/SP/AboutUs/Pages/DiscriminationAgainstWomen.aspx

[2] https://www.telesurtv.net/news/Dia-Internacional-de-la-Cero-Discriminacion-20170301-0013.html

[3] https://observatorioviolencia.pe/entrevista-racismo-y-discriminacion/